Buenos días, buenas tardes, buenas noches, según proceda. Llegamos a los mediados de mayo de 2021, y el Covid sigue cabalgando... muy "tocado" al parecer, pero cabalgando. Actualicemos cuentas: ya son 158 millones de casos a nivel mundial y las muertes que ha producido superan los tres millones... afortunadamente las vacunaciones aumentan y es de esperar que no tardando mucho se alcance lo que se conoce como "inmunidad de rebaño". Y sí... es que de "rebaño" tenemos bastante.
En esta "santa" (o lo que sea) España, acabamos de salir del "Estado de Alarma", lo que hace desaparecer o aminorar, según los casos, las limitaciones de horario y movimiento a que estábamos sometidos. Pero tal cosa no quiere decir que ahora podamos olvidar precauciones y pensar que "esto" se ha acabado. Ni mucho menos... Y curiosamente, los jolgorios se han multiplicado por todo el país, en aglomeraciones incontroladas en las que no se ha respetado ninguna medida de seguridad.
Que sí, que está muy bien quedar con los amigos, disfrutar la noche y tomarse unas copas. Pero con todas las precauciones posibles... no vayamos a tener un rebrote "de los serios" y por disfrutar la primavera (a lo loco), se nos estropee el verano... o el futuro en bloque. En fin, eso: cuidadín, cuidadín.
Empiezo con este post, una de mis "tandas", que en este caso se compondrá de cinco entradas: ésta, sobre escenografía, dos sobre temas históricos y dos de Fantasy. Vamos con la primera:
Los editores del juego "Saga", dedicado en principio a escaramuzas en la Temprana Edad Media, crearon posteriormente una variación del juego añadiendo elementos fantásticos, a la que denominaron "Dungeon Saga"; un juego de "mazmorreo" con miniaturas. Y como complemento, y siguiendo los pasos del legendario "Heroquest", comercializaron un pack con mobiliario para ambientar escenográficamente las partidas.
Y es el contenido de ese pack, lo que voy a mostrar en la presente entrada, que abro con "la biblioteca", una pieza sugerente, sin duda. La adición de la calavera es cosa mía, pero no dudo que su inclusión dota a la pieza de un plus de misterio y de una invitación a la reflexión
Y aquí tenemos el aparador. Con más libros y cachivaches varios, entre los que se incluyen pócimas mágicas que harán las delicias de cualquier mago o hechicero que posea este elemento.
Los dos elementos juntos crean en la mazmorra un espacio adecuado para el estudio, la meditación o las invocaciones, aparte de ser un buen fondo para fotografiar figuras; como comprobaremos en la última foto.
Y ya que vamos de libros y meditaciones... ¿qué más apropiado que continuar con un bonito atril? El volumen sobre el soporte es en principio una pieza independiente; pero creo que tanto el libro como el atril ganan con su unión. Para dar énfasis a la cuestión, podemos imaginar que el texto es el "De Vermys Mysteriis".
El Trono del Señor Enano. La primera aventura del juego básico en Dungeon Saga se desarrollaba en una antigua fortaleza enana; y desde luego el trono se ve bastante "enanil".
Una pieza que merece la pena fotografiar desde varios ángulos. Y un modelado imaginativo y resultón. El mismo Balin estaría orgulloso de sentarse ahí.
Hablando de Balin... esta podría ser su tumba. Solo tenemos que situar la aventura en los túneles de Moria. Por cierto, habría sido interesante que la mini hubiese sido modelada en dos piezas, de forma que la tumba pudiese abrirse...
... lo que daría muchas posibilidades al juego. Cada uno podría elegir si poner en su interior una momia, una serpiente, un montón de monedas de oro... Pero no, no se abre. :/
Y el pozo... si está Pippin cerca, procurad alejarle del brocal, no se le vaya a caer cualquier cosa dentro y despierte "lo que no debe ser despertado"...
... porque lo terrorífico de este pozo, es pensar lo que puede salir por su boca: ¿una lombriz gigante, una docena de trasgos, un inspector de Hacienda...? No quiero ni pensarlo. ;)
Un par de humildes mesas. Poco misterio tienen, pero tampoco están mal...
Un sólido armero con los escudos de los señores enanos.
En su reverso vemos las armas favoritas de los enanos: hachas y martillos de guerra. La ballesta, posiblemente se la dejó olvidada ahí algún humano.
Y obviamente, en cualquier dungeon o mazmorra que se precie, no pueden faltar cofres y barrilitos sin cuento, en cuyo interior podremos encontrar joyas o tesoros incalculables, pero también venenos y trampas mortales. Nunca se sabe...
En este caso, a las piezas originales de Dungeon Saga, he añadido otras, de ignota procedencia... pero quedan bien todas juntas.
Terminemos el post comprobando la bonita ambientación escenográfica que permiten estos elementos de mobiliario; y lo hacemos con la inclusión de una siniestra figura (de la que hablaremos más extensamente en otro sitio). Una figura que, con su volumen de conjuros en la mano (o zarpa) izquierda, ensaya con la derecha ciertos pases mágicos; pases de destrucción y muerte, que complicarán mucho la vida a los exploradores que osen penetrar en "su" mazmorra. Suponemos que esta escena se desarrolló tras la marcha (o huida) de los enanos del lugar.
Y con esto, abandonamos mueblecitos y elementos escenográficos y nos dedicamos a otra cosa.
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Otra nota sobre la "Batalla Cultural".
Afortunadamente, el día 4 de mayo de 2021 se impuso el sentido común y la derecha liberal ganó por mayoría las elecciones para la Asamblea de Madrid. Sin embargo, aunque el partido en el gobierno (que no quiero nombrar), ha perdido gran número de escaños, también es cierto que el voto comunista ha subido significativamente. Supongo que todavía muchos de esos votantes no terminan de percatarse de que si la pobreza es el semillero de votos de socialistas y comunistas, no van a ser éstos tan simples, una vez en el poder, como para procurar erradicarla. Si lo hicieran, irían contra sus propios intereses. Es de pura lógica; me parece.
Y curiosamente (o no) al día siguiente de las elecciones, el gobierno hace pública la lista de la subida de impuestos que prepara. No el día de antes, no; el día después. Lo que me recuerda que la sentencia de los EREs de Andalucía se hizo pública cuatro días después de las últimas elecciones generales. Tampoco aquí, días antes, sino días después. ¿Casualidad?
Luego, algún personaje del gobierno, ha dicho que los votantes de la derecha son fascistas. ¿Fascistas...? Las narices. Lo que tampoco somos es tontos, oiga. En fin, detalles como los hechos citados, me llevan a insistir en que es necesario difundir la Batalla Cultural. Es necesario que antes de que lleguen las próximas elecciones generales, la pretendida "superioridad moral" de las izquierdas haya sido desenmascarada; por el bien de todos.
A ver si es posible... en cualquier caso: ¡menudos dos años (o tal vez más) nos esperan! ;)
