Tenía desde hace tiempo, olvidados en "la montaña de plomo" (de plástico en este caso), un par de gusanetes pendientes de pintar. Como hace poco conseguí otro par, y al mismo tiempo, una figura que no siendo un gusano, sí está dotada de unos buenos tentáculos, consideré que cinco minis unidas por cierta homogeneidad, ya me daban suficiente consistencia para un post: éste.
Gusanos y tentáculos no son lo mismo, claro está. Pero al menos sus morfologías sí tienen ciertas similitudes. Tanto gusanos como tentáculos (aunque éstos sean una parte y no el "todo" del animal o cosa propietario/a) son alargados, viscosos, "culebreantes"... así pues, hablemos "de gusanos y tentáculos".
Y empezamos con este "Carrion Worm", o Gusano Carroñero. Una figura, que en su horribilidad, ofrece una estética indudable; estética oscura, sí, pero estética al fin. Una de esas minis de las que podemos decir que "el escultor se ha lucido".
El Gusano Carroñero transita por túneles subterráneos, en busca constante de materia en putrefacción, de la que se alimenta. Pero no desdeña comer carne fresca, cuando en una de sus ocasionales salidas al exterior, vislumbra algún explorador incauto en las inmediaciones.
Aunque generalmente sus subterráneas andanzas tienen lugar bajo campos o bosques, no duda en penetrar bajo edificaciones humanas o pasadizos dungeonianos, para emerger de pronto cuando detecta movimiento sobre él. Sus fuertes mandíbulas pueden destrozar rocas, baldosas o cualquier material pétreo, y una vez se ha abierto camino al exterior, sembrará la muerte en derredor para saciar su apetito.
Como este ángulo de la figura es el más "favorecedor" (dentro de lo que cabe), lo aprovecho para fotografiarlo con diferentes fondos para que se aprecie como cambia sutilmente la tonalidad de la mini según el color del fondo.
Primo hermano del más conocido "Gusano Púrpura" y pariente lejano (literariamente hablando) de los Gusanos de Arena que nos presentó Frank Herbert en "Dune", el "Great Worm" o "Gran Gusano", deambula bajo desiertos y pedregales...
...devorando cualquier traza de materia orgánica que pueda detectar. Puede llegar a medir veinte metros de largo y sus fauces abarcan dos. Cuando sale a la superficie (lo que puede ocurrir a campo abierto o en el interior de una edificación humana) su gran tamaño le permitirá engullir de un bocado a cualquiera que tenga la mala suerte de encontrarse cerca de sus colmillos.
Una figura, la de este gusano, que al contrario que el Carroñero, tiene muy pocos ángulos "favorecedores". Presenta un modelado más bien tosco, y para poder fotografiarla de modo que se aprecie su boca (su faceta más vistosa), es necesario inclinar la figura hasta el límite del equilibrio. Sin esa inclinación, la vista de la figura no pasa de presentar la apariencia de un tubo retorcido, como podemos comprobar. Una miniatura en definitiva, que no es "la más bonita" creada por Reaper... aunque tiene cierta gracia.
La sanguijuela normal pertenece a la familia de los gusanos anélidos, siendo por tanto este ser, el único del presente post que tiene parientes de existencia real. Pero evidentemente, ésta no es una "sanguijuela normal"; es una "Sanguijuela Gigante", que afortunadamente sólo existe en los mundos de Dungeons and Dragons y similares...
La Sanguijuela Gigante puede medir dos metros de longitud, siendo su habitat natural tierras pantanosas o cenagales, donde esperará oculta la aproximación de alguna víctima de sangre caliente de la que pueda alimentarse. Pero también puede habitar en las zonas más profundas de dungeons o ruinas, donde la humedad es grande y los detritus orgánicos abundantes.
Su ataque, consiste generalmente en lanzarse sobre el pecho de la criatura elegida, destrozándole el esternón de un mordisco, para una vez muerta su víctima, adosar su ventosa posterior sobre la sangrante herida, permaneciendo sobre ella hasta que no quede una gota de sangre en el cuerpo.
Si en el primer mordisco no consigue matar a su víctima y ésta consigue huir, existen muchas posibilidades de que contraiga alguna enfermedad, ya que la saliva de la sanguijuela gigante, si bien no es venenosa, sí contiene gran número de bacterias.
Sin embargo, existe un elemento abundante en la naturaleza que puede acabar con las sanguijuelas gigantes a su mero contacto: el cloruro de sodio; o lo que es lo mismo: la sal común, el mismo producto con que sazonamos un huevo duro. Por tanto, ya sabéis: si vais a introduciros en algún dungeon especialmente húmedo, o a transitar por una pantanosa selva, portad con vosotros un buen saquito (o dos) de sal.
Dejando los gusanos, llegamos a los tentáculos. Aquí tenemos un "Alhoon", un "desollador de mentes". Aunque su apariencia tentacular nos haga pensar en los horrores lovecraftianos, este horrible ser no tiene nada que ver (dicen sus creadores) con nuestro amigo Cthulhu y sus parientes, sino que tiene su origen en los bestiarios de "Dungeons and Dragons". En el Manual de Monstruos n.1 (en español) aparece como "Azotamentes".
El Alhoon es una variación del "Lich", el "hechicero no muerto", que le precedió en el bestiario de D&D. Al igual que su predecesor, el Alhoon se mantiene vivo por un constante ejercicio de la Magia Negra. Su especie (conocida como los ilícidos) procede de una lejana galaxia, pero llegaron a nuestro mundo hace mucho tiempo, y desde entonces, considerándose la raza suprema del universo, aspiran a conquistarlo... Un momento: ¿Cualquier parecido entre "esto" y el origen de los Primigenios que nos narró el genio de Providence, será mera coincidencia? Para mí, que no. ¡Qué poca creatividad tienen los nuevos hacedores de monstruos! En fin, continuemos...
Aquí vemos al Alhoon acompañado de un par de "Devoradores de Intelecto", también conocidos como "Perros cerebrales", que le auxiliarán en el rastreo y búsqueda de víctimas con las que pueda alimentarse; porque el Alhoon tiene la mala costumbre de alimentarse de cerebros. Cerebros humanos. Se supone que con esta alimentación aumenta su ya poderosa inteligencia.
Sobre la figura: El Alhoon se comercializa en un pack conjuntamente con los "Devoradores de Intelecto". Sin embargo, el modelado del primero está mucho más cuidado que el de los segundos. Es otro de esos casos (el de los devoradores), en que el "render" de las figuras que vemos en la Red, luce maravillosamente, pero que una vez la mini en mano, defrauda bastante. Puede ser por su ínfimo tamaño (la parte central de la mini roza los 5mm), pero es el caso que el modelado real dista mucho de la calidad que hacía esperar el render.
La figura pretende ser una especie de "cerebro sangriento con patas"... en la realidad asemeja una pelotilla informe, a la que cuesta mucho dotar de coherencia a la hora de pintarla. Hay que "inventar" bastante. Y luego está el problema de fotografiar la figura de manera que se vea algo concreto y no "la pelotilla" citada. Baste decir que el tamaño que se puede ver aquí arriba viene a representar cuatro aumentos sobre la figura original. Menos mal que soy un amante de las fotos-detalle, de otra manera no se apreciaría "nada".
Y aquí tenemos a toda la familia "gusanil" a las órdenes del Alhoon, que en mis estanterías será "El Señor de los Gusanos".
Todas las figuras del presente post, están catalogadas en "Dungeons and Dragons" como "Aberraciones" y su alineamiento es "Caótico Maligno". No podía ser de otra manera, con esas pintas... ;)
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Con este post acabo la "tanda" de cinco, que publico en mayo de 2021.
¡Hasta la próxima!
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Las figuras son:
El Gusano Carroñero, el Gusano Gigante, y las Lombrices,
de Reaper Bones
(Ref. Carrion Worm, 77541)
(Ref. Great Worm, 77006)
(Ref. Giant Leeches, 44031)
El Alhoon y los Devoradores de Intelecto,
de Wizkids Miniatures.
- Todas en plástico -
